Nao trabaja en una empresa (que explota a sus empleados). Día tras día, trabaja horas extras sin cobrar… y su corazón y su cuerpo están llegando a sus límites. Un día, incapaz de quedarse de brazos cruzados y mirar más, uno de sus amigos, Tenyuu, se ofrece a darle un masaje. Su hábil toque afloja los nudos y cura su cuerpo cansado… ¿Eh? ¿Espera, qué? ¿¡Por qué sus manos están tocando allí!?
Antes de que ella se diera cuenta, él estaba sintiendo su cuerpo de arriba a abajo… Incapaz de resistirse, la frotan, la manosean, la desgarran y… la mojan a borbotones.
La verdad sea dicha, estos dos han albergado sentimientos el uno por el otro durante bastante tiempo… pero no han podido expresar sus sentimientos y confesarse. Si bien sus cuerpos son honestos… sus sentimientos no lo son…
El Masaje lascivo de mi amigo de la infancia

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